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Property Distribution
Distribución de bienes, también conocida como división de bienes o distribución equitativa, es el proceso legal mediante el cual se dividen los activos y las deudas entre dos partes, generalmente cónyuges, cuando una relación matrimonial termina debido a divorcio o separación.
Puntos clave sobre la distribución de bienes incluyen:
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Implica dividir todos los bienes matrimoniales, que incluyen activos y deudas adquiridos durante el matrimonio, tales como bienes raíces, vehículos, cuentas bancarias, ahorros para la jubilación y deudas contraídas.
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El objetivo es lograr una división justa y equitativa, lo que no significa necesariamente una división igual al 50/50, sino lo que sea justo considerando las circunstancias.
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Los tribunales o las propias partes pueden decidir la división ya sea mediante acuerdo (liquidación de bienes) o decreto judicial.
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Los factores que influyen en la distribución suelen incluir la duración del matrimonio, los ingresos y potencial de ganancias de cada parte, las contribuciones para adquirir y mantener los bienes, y las necesidades de cada parte (por ejemplo, custodia de los hijos, atención médica).
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El proceso generalmente involucra tres pasos:
- Identificación y clasificación de los bienes en bienes separados, matrimoniales o divisibles.
- Valoración de los activos y deudas a la fecha de la separación.
- Distribución de los bienes y deudas a cada parte.
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Los bienes separados (por ejemplo, herencias o regalos) usualmente se excluyen a menos que se hayan mezclado con bienes matrimoniales o se hayan usado para mejorar bienes matrimoniales, en cuyo caso pueden estar sujetos a distribución.
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Los bienes divisibles incluyen activos o deudas que surgen entre la separación y el decreto final de divorcio, como bonificaciones o dividendos ganados pero recibidos después de la separación.
En resumen, la distribución de bienes es un proceso legal estructurado destinado a dividir de manera justa los activos y pasivos financieros y físicos acumulados durante un matrimonio cuando éste termina, asegurando que ambas partes reciban una parte equitativa basada en diversos factores relevantes.