En Carolina del Norte, no se requiere un examen físico antes de administrar una prueba de alcoholemia (prueba de alcohol en aliento). El proceso para la prueba de aliento está regulado por estándares técnicos y procedimentales específicos, en lugar de cualquier examen físico previo.

Puntos clave sobre la prueba de alcoholemia en Carolina del Norte incluyen:

• Las pruebas de aliento se realizan utilizando dispositivos aprobados que cumplen con los estándares establecidos por el Departamento de Salud y Servicios Humanos y la Rama de Pruebas Forenses para Alcohol.

• Antes de la prueba oficial de aliento con valor probatorio, existe un período obligatorio de observación de 15 minutos durante el cual la persona no debe comer, beber ni poner nada en la boca para garantizar la precisión de la prueba.

• La prueba de aliento debe ser administrada por un operador certificado siguiendo procedimientos estandarizados, incluyendo la realización de dos pruebas cuyos resultados estén dentro de un rango de 0.02% entre sí.

• La ley de consentimiento implícito significa que una vez arrestada una persona por conducir bajo la influencia, se presume que consiente a las pruebas químicas, que pueden ser de aliento, sangre o orina. La aplicación de la ley puede elegir el método de prueba a su discreción.

• No hay mención en la ley o las reglas procesales de Carolina del Norte que indique que un examen físico sea un requisito previo para realizar una prueba de alcoholemia. El enfoque está en la correcta administración y calibración del dispositivo de prueba de aliento, así como en los protocolos de observación.

Por lo tanto, aunque los oficiales pueden observar a la persona para detectar signos de intoxicación o problemas médicos, un examen físico formal no es un paso requerido antes de una prueba de alcoholemia en Carolina del Norte. El marco legal enfatiza los estándares del dispositivo, la certificación del operador y los períodos de observación en lugar de exámenes médicos.